Teresa

0 Creado por el Vie, 01 diciembre 2023, 12:15

'Teresa', en Histerias de Cine

FICHA TÉCNICA

País: España
Dirección: Paula Ortiz
Guión: Paula Ortiz, Javier García Arredondo. Obra: Juan Mayorga
Fotografía: Rafael García
Reparto: Blanca Portillo, Asier Etxeandia, Greta Fernández, Ainet Jounou, Consuelo Trujillo, Urko Olazabal, Julia de Castro, Claudia Traisac, Luis Bermejo, Miriam Moukhles, Miriam Escurriola, Núria Florensa
Género: Drama
Año: 2023
Duración: 100′

SINOPSIS

Teresa espera paciente la llegada del Inquisidor para ser juzgada. De su visita y de sus palabras dependerá su futuro: libertad, cárcel o la hoguera. Adaptación de la obra de teatro “La lengua en pedazos” de Juan Mayorga, basada en la figura de Santa Teresa de Jesús, también conocida como “Santa Teresa de Ávila”.

TRAILER

NUESTRA OPINIÓN

'Teresa', en Histerias de Cine

«¿Nunca dudáis, Teresa?»

Muchas han sido las versiones cinematográficas, dejando a un lado el teatro, las miradas, los perfiles y los rostros que se han mostrado de la figura de Santa Teresa. Desde la primera película muda ‘Escenas de la vida de santa Teresa’ (Francisco Beringola, 1926), Teresa ha sido encarnada por Aurora Bautista (Teresa de Jesús, Juan de Orduña, 1961), Concha Velasco en la serie de televisión (Josefina Molina, 1984), Isabel Ordaz en la virtual ‘Teresa, Teresa’ (Rafael Gordon, 2003) y Paz Vega (‘Teresa, el cuerpo de Cristo’, Ray Loriga, 2007).

Paula Ortiz (‘De tu ventana a la mía’, ‘La novia’) adapta la obra teatral de Juan Mayorga, ‘La lengua en pedazos’, (inspirada en ‘El libro de la vida’), aproximándose más a la persona, a Teresa Sánchez de Cepeda Dávila y Ahumada, que a la Santa. La particular mirada que propone la directora aragonesa, parece buscar al ser humano, a la mujer, en un momento de su vida que, terminada la reforma de la orden, se le impone desde las instancias eclesiásticas el cierre de su primera fundación, el convento de San José, y su vuelta a la ortodoxia de la Iglesia.

La película comienza con un sueño, utilizando narrativamente una secuencias de montaje a modo de collage, que condensan temporalmente diferentes momentos de su vida a los que volverá después y que conjugan esa dualidad, ese permanente conflicto: la oscuridad de la infancia, un pájaro surge de su pecho, una vela se apaga, una puerta que se abre para transitar mediante un fundido en blanco, a la luminosa y pastoral juventud (encarnada por Greta Fernández), dedos de fuego, la levitación y la arboleda, el cielo y el sol entre las nubes, para posteriormente mostrarla, ya adulta, enterrada, literalmente, en un campo dorado. A partir de ahí, entre cazuelas y cacharros de la cocina del convento («Entre los pucheros anda el Señor«), se inicia un duelo actoral y dialéctico, entre Blanca Portillo y Asier Etxeandia, entre Teresa y el inquisidor. La cocina como espacio judicial, como ring verbal, en una pelea teológica y terrenal, en un permanente cuestionamiento de su pasado (la pureza familiar) al que se remite una y otra vez.

Paula Ortiz articula la película a través de la dualidad, del conflicto, con ella misma, con el inquisidor y con su pasado. Y es a través de las preguntas, de la dialéctica del combate, de las dudas, a través de las que recorremos momentos de su vida y de su imaginación. El rostro níveo, expresivo, de Blanca Portillo, que recuerda en sus encuadres de primeros planos a la Juana de Arco de Dreyer y en el estatismo, a la de Bresson; frente al gesto y verbo más pretencioso de Asier Etxeandia, ambos magníficos pilares en los que se apoya la estructura de la película. A través de la palabra se visualiza el conflicto de Teresa y la Iglesia, entre dos concepciones distintas de la fe: la duda y la libertad, frente a la ortodoxia y la jerarquía. Un conflicto que inicialmente aparece mostrado con simbología clara: ella de blanco, la luz; él de negro, el fuego rojo en su rostro, el humo de la hoguera ocultándolo, a contraluz. Las palabras van y vienen, en pugna, chocando y retrocediendo, como las olas del mar golpeando sobre la roca, avanzando para después cejar.

'Teresa', en Histerias de Cine

El espacio como elemento de definición del estado emocional de los personajes, en un conflicto de líneas claras, que se difuminan progresivamente; combinando diferentes espacios, presentes y pasado, reales y oníricos. Un pasado que funciona visual y narrativamente como contraste, como escape de ese espacio mundano, cotidiano y teatral de la cocina, y sobre el que la directora aragonesa despliega y proyecta su particular estética para contar, con imágenes alegóricas, su infancia y su juventud, jugando con la luz, los elementos naturales, y las evocaciones sonoras. Metáforas visuales para narrar lo paranormal, lo místico, la sensibilidad a flor de piel, partiendo de elementos de la naturaleza: el sol, el viento, el agua, el fuego, el bosque. Una iconografía que remite al imaginario de las poéticas de los místicos castellanos, de tormento y éxtasis, de goce y sufrimiento: la paloma, el cisne, la llagas en los dedos, la luz, las tinieblas y el infierno, la levitación y los pies descalzos, las diferentes coronas, la visión de Dios. Y ello acompañado con una estética pictórica, que se mueve entre el romanticismo naturalista y colorista, y el barroco del claroscuro. Plena también de referentes cinematográficos: desde la dualidad de ‘Persona’ (Bergman), a la resurrección de ‘Ordet’ (de nuevo, Dreyer) e incluso el vacío espiritual y físico de ‘Orfeo Negro’ (Powell y Pressburger). Combina el romanticismo y la poética de las imágenes del pasado, con la sencillez y crudeza de las escenas en la cocina, con la emoción desbordada de las escenas en el claustro (rodado en Juan de la Peña) mirando al vacío a merced de los elementos.

Y todo ello para hablarnos de una mujer que se rebela contra las estructuras que imponían que las mujeres tenían que estar bajo la tutela de curas o de otros hombres, que habla de la igualdad frente a la jerarquía, de la cooperación frente al poder, de la libertad. Y ello a través de la pasión, del amor universal, la perseverancia, de la contradicción y la duda, como elementos de transformación y reforma, como única forma de avance del conocimiento, de cuestionamiento y mejora del «status quo», desde la intelectualidad, la espiritualidad y la terrenalidad.

Una película (y una mujer) muy actuales, pero sin descontextualizar, sin apropiaciones ni atribuciones; porque una de las maneras de navegar entre las procelosas aguas de la información partidista, del creciente y descontrolado espacio de Internet, de la palabra con la verdad absoluta, es la duda. La duda respecto a uno mismo y respecto a los demás; la duda como defensa contra cualquier dogmatismo y contra cualquier totalitarismo. Y Teresa, rompiendo la cuarta pared, parece preguntarnos ¿nunca dudáis?.

«En la contradicción está la ganancia»

MÁS INFORMACIÓN

Web oficial: –
IMDb: http://www.imdb.com/title/tt12410714/
FilmAffinity: http://www.filmaffinity.com/es/film193578.html

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