La única condición que puso August Wilson, autor de la obra de teatro ganadora de un premio Pulitzer y del guión, para llevarla al cine, era que fuese dirigida por un director afroamericano. Tras algunos intentos fallidos, Denzel Washington, asume el reto para dirigir su tercera película. La película constituye un profundo drama sobre las vicisitudes de una familia afroamericana en los años 50...
