La película es una exploración introspectiva sobre la identidad y sus múltiples fragmentaciones: personales, familiares y sociales. La protagonista, Ana, trata de reencontrarse consigo misma. La relación con su hijo Son, marcada por la tensión de su propia identidad, y el conflicto latente con su exmarido francés por la custodia, y su propia situación profesional, son los motores de una narrativa que plantea una pregunta esencial: ¿cómo reconciliar nuestras múltiples facetas para encontrar paz?...