Grand Tour

0 Creado por el Vie, 07 marzo 2025, 12:04

'Grand Tour', en Histerias de Cine

FICHA TÉCNICA

País: Portugal
Dirección: Miguel Gomes
Guión: Telmo Churro, Maureen Fazendeiro, Miguel Gomes, Mariana Ricardo
Fotografía: Gui Liang, Sayombhu Mukdeeprom, Rui Poças
Reparto: Crista Alfaiate, Gonçalo Waddington, Jani Zhao, João Pedro Vaz, Teresa Madruga, Manuela Couto, Lang Khê Tran, Diogo Dória, Cláudio da Silva, Américo Silva, João Pedro Bénard, Jorge Andrade, Joana Bárcia, André Lourido, Giacomo Leone
Género: Drama
Año: 2024
Duración: 129′

SINOPSIS

Rangún, Birmania, 1917. Edward, funcionario del Imperio Británico, huye de su prometida Molly el día que ésta llega para casarse. Durante su viaje, sin embargo, el pánico da paso a la melancolía. Contemplando el vacío de su existencia, el cobarde Edward se pregunta qué habrá sido de Molly… Decidida a casarse y divertida por la jugada de Edward, Molly le sigue la pista a través de Asia.

TRAILER

NUESTRA OPINIÓN

'Grand Tour', en Histerias de Cine

«ARRIVING. STOP»

El cine de Miguel Gomes es un cine de exploración, de despojamiento narrativo y de juego constante con las formas y los géneros; y ‘Grand Tour‘ se inscribe en esta línea, ofreciendo una experiencia fílmica que se resiste a las estructuras convencionales del relato. No es una historia lineal, ni un drama convencional, sino un viaje construido a partir de fragmentos, donde la ficción y el documental, y los diferentes géneros (desde la screwball comedy, al drama, pasando por el romance y el cine de aventuras), se entrelazan en un collage de imágenes, sonidos y texturas. Una película que remite al cine clásico, a Murnau, a von Sternberg, a Marker y al ‘Heart of Darkness’ de Conrad.

Desde el inicio, ‘Grand Tour’ establece dos movimientos contrapuestos: el de un personaje que huye y el de otro que lo persigue; el de Edward Abbot (Gonçalo Waddington), un funcionario del gobierno británico instalado en Rangoon en 1917 que decide marchar el día de su boda, y el de Molly Singleton (Cristina Alfaiate), la futura esposa (inaccesible al desaliento), que debe llegar a la boda proveniente de Londres. La película presenta estos trayectos como un juego de espejos, en el que los espacios se repiten y las experiencias se reflejan con variaciones, en un juego de perspectivas, de miradas, de resignificación de lo visto y la generación de nuevos códigos. El sudeste asiático se convierte en el tablero de esta coreografía del destino, con escenarios que van desde Myanmar, hasta Japón, pasando por Tailandia, Vietnam, Filipinas, y China, en un viaje que rememora aquellos del XVIII de la aristocracia europea a la Italia del arte, y ya a principios del siglo XX por tierras coloniales de Asia. ‘Grand Tour’ propone una mirada borrosa al pasado, al imaginario mítico del colonialismo y el orientalismo, desde un presente filmado como una crónica de viajes.

'Grand Tour', en Histerias de Cine

Pero más allá del desplazamiento geográfico, la película es un viaje cinematográfico que explora la memoria, el tiempo y la imposibilidad de asir la realidad en su totalidad. Gomes, como en sus trabajos anteriores (‘Tabú’ o ‘Las mil y una noches‘), desarma la estructura clásica del relato para sumergirnos en una experiencia sensorial, donde lo que importa no es solo lo que se cuenta, sino cómo se cuenta.

Uno de los rasgos más característicos de ‘Grand Tour’ es su trabajo con la imagen, en un formato cuadrado acorde a las primeras imágenes del cinematógrafo y a las fotografías de viajes; y que alterna entre el blanco y negro y el color, que representa la ficción (rodada en estudio) y el documental, generando contrastes que refuerzan la sensación de un tiempo discontinuo y fragmentado y la vez vínculos y ecos de una cierta continuidad vital. El blanco y negro, estilizado y brumoso, evoca una sensación de pasado, de archivo, como si estuviéramos viendo recuerdos o documentos de un tiempo perdido. En cambio, el color introduce una vibración distinta, a veces cálida y exuberante, otras fría y distante, y aunque documental, pretendidamente artificial. Este uso de la imagen, no responde únicamente a una cuestión estética, sino que funciona como un dispositivo narrativo que separa y al mismo tiempo conecta los distintos registros de la película, y enfatiza la naturaleza híbrida de la película. La luz, también juega un papel fundamental en este juego de contrastes. Gomes no busca una iluminación naturalista, sino que la manipula para reforzar la sensación de artificio cinematográfico, expresado en una imagen en la que la protagonista es iluminada por un foco visible, desnudando el truco del cine y destruyendo cualquier ilusión de realismo. Es un recordatorio de que estamos ante una construcción, de que el cine no es más que un juego de luces y sombras. Y a ese juego entre la ficción y el documental, la representación y lo representado, entre lo que se ve y lo que se oculta nos remite mediante imágenes de marionetas, títeres y sombras chinescas, de disfraces y canciones, en la que nos muestra diversas formas de representación (pre cinematográficas), de narrar y al cine como espacio para la invención y la experimentación.

'Grand Tour', en Histerias de Cine

Y esa idea del cine como espacio difuso y dúctil se complementa con el uso de la voz (o de las dos voces) en off, que no se limita a describir lo que vemos, sino que introduce información, descripciones o emociones que las imágenes no muestran. A veces, las voces narran hechos históricos o detalles sobre los lugares que visitan, otras introducen reflexiones más íntimas, casi como si fueran pensamientos en voz alta de los personajes. Gomes juega aquí con la idea de que la imagen nunca es suficiente para contar una historia en su totalidad, de que siempre hay algo que escapa a la mirada y refuerza la sensación de estar ante un relato incompleto, donde lo que se dice y lo que se ve no siempre coinciden. También la música transita entre géneros, en el tiempo y en el espacio, desde el vals del ‘Danubio azul’ al karaoke de ‘My way’, un aria operística, o el broche final de Bobby Darin con ‘Beyond the sea’.

‘Grand Tour’ no es una película fácil. Su estructura fragmentaria, su ritmo pausado y su aparente rechazo a una narrativa tradicional pueden hacer que algunos espectadores la perciban como una experiencia árida y monótona. Sin embargo, es precisamente en esta deconstrucción, en esa poética de la evocación, donde reside su riqueza. Miguel Gomes nos invita a un viaje que no es solo físico, sino también cinematográfico y emocional y nos recuerda que el cine no es una simple ventana a la realidad, sino un artefacto lleno de artificios y espejismos. ‘Grand Tour’ es, en última instancia, un homenaje a esa ilusión que llamamos cine y sus posibilidades narrativas (quizá las que permiten distinguir entre ser un viajero y un turista).

MÁS INFORMACIÓN

Web oficial: –
IMDb: http://www.imdb.com/title/tt27180099/
FilmAffinity: http://www.filmaffinity.com/es/film906229.html

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